Grant Hart- The Argument (2013)

Grant Hart- The Argument (2013)

Tratar de sacar a Husker Du de mis sistema sería prácticamente imposible, fue una banda con la que crecí y con la que sentí gran afinidad en esos difíciles años de adolescencia, Bob Mould y Grant Hart siempre supieron las palabras exactas que cantar o las notas perfectas que tocar para un adolescente atormentado como yo y como muchos, cambiando para siempre el curso de la música en el vecino país del norte, transformando la miopía del hardcore punk en un remolino multicolores de impacto sònico, por lo menos para mi Husker Du fue una banda perfecta, tanto, que nunca los quisiera de regreso y que arruinaran su leyenda, es una banda con una reputación enorme y que definitivamente no merece ser manchada con un mediocre regreso, de todas maneras, Bob Mould se ha mantenido más o menos vigente con sus proyectos en grupo o como solista, siempre estupendamente realizados, bastan con mencionar su proyecto Sugar o su más reciente disco, Silver Age, puras joyas.

Pero no todo en Husker Du era Mould cabe aclarar, y de haber sido así probablemente no hubiesen sido tan grandes (tal vez sólo la mitad), ya que Mould no sólo competía con otras glorias del underground de Minneapolis en aquellos días, como Paul Westerberg de los Replacements o Dave Pirner de los Soul Asylum, también estaba dentro de su misma banda el enorme Grant Hart que a pesar de estar tras una batería, le ponía bastante competencia a Mould en el departamento de composición.

Poniendo atención en los créditos de los discos más fascinantes de los HD como Zen Arcade o el Candy Apple Grey, discos que en verdad me cambiaron la vida y me sirvieron de bálsamo en esa difícil etapa, nos encontraremos que Hart compartía por lo menos la mitad de ellos aportando de esta manera en gran parte a la leyenda en que se convirtiera esta banda, su estilo para crear temas difería por completo de la de Mould, quien definitivamente era más duro y cáustico en sus letras, mientras que Hart desnudaba su corazón y se exponía de más en sus temas, creando una dimensión adicional en la fenomenal banda, con un legado que tal vez se pudiese haber debilitado un poco por lo esporádica que se volviera la carrera posterior de Hart, pero dicen que de lo bueno poco, y los discos de Hart son prueba de ello, rara vez decepcionando y dejando tiempo suficiente para convertirse en un evento cuando este decide re aparecer.

The Argument es el nuevo disco de Hart, un disco enorme, de esencia conceptual (basado en escritos del gran William S. Burroughs, amigo de Hart) con su obligado intro esotérico (Out Of Chaos), Hart no serìa el primero en abordar a Burroughs a través de la música, otros como Bill Laswell y Kurt Cobain lo han hecho antes con particulares resultados, The Argument, hay que decirlo, como su fuente de inspiración es un disco complejo, que demuestra la calidad del trabajo de Hart, desde el post punk de Morningstar que a màs de uno nos recordará algo del sonido nostálgico de los Du, por alguna razón me viene a la mente Pink Turns To Blue, o la legendaria banda mexicana Size, Hart aquí anota su primer acierto con un tema que llega directo al corazón, mientras que en Awake, Arise!, Hart saca a flote el David Bowie que todos llevamos adentro en una pieza casi fúnebre, repleta del dramatismo del camaleón (otro gran admirador de Burroughs, ¿Y de quien no? en sus mejores años, cabe recalcar aquí el brillante trabajo de Hart, alcanzando rangos que definitivamente desconocíamos en su trabajo, demostrando un gran crecimiento como artista que definitivamente ha conseguido escapar y desmarcarse de su pasado como baterista.

En If We Have The Will, nuevamente Hart se reta a si mismo, abordando un arreglo desquebrajado que nos podría recordar los trabajos más surrealistas de Dylan o de un Tom Waits, resulta por demás interesante percibir la gran influencia artística que parece tener el ya mencionado Bowie en esta nueva etapa de Hart, sin duda una influencia que lo ha empujado a sacar adelante un complejo trabajo con resultados tan dignos de disfrutarse.    

Hart añade generosas dosis de sintetizadores en la siguiente pieza, I Will Never See My Home, otro increíble tema con densas capas de sonido y un intenso trabajo dramático por parte de Hart en su interpretación, quien nuevamente nos sorprende con su vasto arsenal de trucos musicales, para después subirle a la velocidad a los ritmos en la casi teatral y amenazante I Am Death, consiguiendo materializar un sonido del pasado que pareciera por momentos mandarnos a otra dimensión, truco que repute en Sin con sus sendos teclados retro, trayéndonos recuerdos de algunos de los temas más delicados del gran Ray Davies.

La gran sorpresa del disco sin duda se encuentra en Letting Me Out, que crea corrientes eléctricas que nos recorren la piel poniéndola de gallina, tema en el cual Hart consigue de manera increíble revivir el espíritu candente de Buddy Holly, en un tema que a más de un nostálgico como un servidor nos removerá muchas fibras internas.

The Argument es un vasto documento, con Grant apuntando a todas direcciones y lo màs sorpredente, haciendo blanco en muchas de ellas, desde las hermosas guitarras retro en Shine, Shine, Shine, la densa y pausada Is The Sky The Limit, el proto prog de Golden Chain, el obvio guiño a los 50s de So Far From Heaven, y el rock garagero que nos recuerda mucho a los primeros trabajos de Alice Cooper en It Isnt Love.

The Argument es sin duda una obra maestra de gran escala, Hart no sólo ha conseguido entrar esta vez con el pie derecho, sino que nos ha dejado una obra MAYUSCULA, un disco que para muchos podría representar el trabajo de toda la vida, consolidando la carrera de Hart, y cumpliendo de manera cabal el que debe ser uno de sus grandes sueños, dejar la sombra de su anterior grupo, lo cual sin duda ha logrado, y de pasada nos ha hecho uno de los regalos sonoros más grandes que nos han hecho este año.